Explorando nuevas perspectivas: transforma tus creencias y conviértete en la mejor versión de ti mismo.

¿Qué nos impide echar raíces en un nuevo destino?

Alejandra Ginty Vázquez Moreno.

5/1/20258 min read

¿Por qué en ocasiones podemos sentir que establecernos en un nuevo país resulta complicado?
Nuestras creencias, pensamientos y valores determinan quienes somos: de ellos dependen nuestras actitudes.

El modelo educativo de Semiología de la Vida Cotidiana® es una propuesta de educación permanente orientado al desarrollo de la conciencia y nos ofrece las herramientas para poder leernos a nosotros mismos y nuestra vida con mayor claridad. Bajo este esquema educativo podemos analizar los pensamientos, las creencias y los valores.

Cada uno de ellos forman un sistema, es decir un flujo de información ordenada. Nuestro sistema de
pensamientos, sistema de creencias y sistema de valores sustentan nuestras actitudes.

Al abordar la temática de los pensamientos nos referimos a las convicciones racionales. Se trata la capacidad
que tenemos de crear ideas propias y representaciones de la realidad en nuestra mente que se generan
a partir de los procesos de la razón.

¿Somos conscientes de la gran cantidad de pensamientos que generamos constantemente a lo largo de un día?
¿Y que un gran porcentaje de esos pensamientos se repiten mecánicamente un día tras otro?

Si queremos empezar a cambiar algo en nuestra manera de adaptarnos al nuevo lugar en donde hemos
decidido vivir es muy importante que empecemos a percatarnos de nuestros pensamientos. ¿Qué tipo
de pensamientos tenemos respecto a nuestro nuevo lugar de residencia, nuestros vecinos, nuestro
nuevo estilo de vida, nuevo trabajo, nuevo entorno?

¿Qué pensamos de nosotros mismos? ¿Nos pensamos como alguien nuevo cada día? No somos las mismas personas de ayer, ni las mismas después de habernos despedido de nuestro amado país y haber dejado atrás nuestras vidas para emigrar a España movidos por las más profundas razones y dar este gran cambio. Somos alguien nuevo cada día.

¿Nos pensamos así realmente?

Si todo es nuevo y cambiante, tenemos la oportunidad perfecta de generar nuevos pensamientos que nos ayuden a construir nuestro presente, una historia diferente que se nutra de una energía positiva que brote de nuestra esencia y que sea la fuente que alimente nuestros pensamientos.

Descansa, respira, haz una pausa y contempla lo que piensas de ti, lo que piensas del entorno y de lo que te rodea
y del impacto que ese entorno tiene en ti.

Observa ahora mismo tus pensamientos: ¿hacia dónde te llevan?,
¿qué piensas respecto a este nuevo día viviendo en España?

Si empezamos a centrar la atención en nuestros pensamientos los podemos monitorear, dirigir y transformar
y esto es posible, solo si somos conscientes y nos percatamos de ellos. Donde está nuestra atención, ahí está nuestra energía. Para lograr un cambio podemos tener a partir de ahora, la clara intención de atender nuestros pensamientos
el mayor tiempo posible.

Por otro lado, están las creencias que son las certezas intuitivas: es el estado de la mente en el que consideramos que algo es cierto, es ese convencimiento mental ya sea de una experiencia, idea o teoría que se toma como verdadera con una completa conformidad de que es auténtica. Tenemos creencias sobre prácticamente todos los ámbitos de nuestras vidas y las proyectamos constante y continuamente.

Por último y no menos importante está el sistema de valores: la propuesta educativa del modelo de
Semiología de la Vida Cotidiana® lo expone como nuestras preferencias afectivas.

Son códigos de conducta que nos marcan profundamente y nos sirven de guía para construir relaciones humanas armónicas con nosotros mismos y con los demás. Los valores de una persona están presentes a lo largo de toda la vida y se manifiestan constantemente en nuestras acciones y decisiones.

Nuestros valores sustentan nuestras prioridades; y cuando las prioridades están claras, las decisiones son fáciles.

Colectivamente, son los valores o principios los que contribuyen a avanzar como sociedad ya que conducen nuestra forma de actuar, ser y pensar, tanto consciente como inconscientemente. Hay valores universales, personales, familiares, religiosos, sociales, éticos, estéticos, morales, etc.

Entre los valores más apreciados por las personas en general están: la honestidad, el respeto, la prudencia, el esfuerzo, la tolerancia, la ética, el compromiso, la humildad, la solidaridad, o la empatía, entre muchos otros. ¿Cuáles son los valores que más admiras en esta sociedad en la que ahora emprendes tu proyecto de vida? ¿Con qué valores resuenas más y con cuáles detectas que te confrontas?

Cada uno de nosotros ha ido conformando su propio sistema de pensamientos, creencias y valores, son únicos y forman parte de nosotros. No hay dos iguales: existen tantos, como personas en el planeta.

Nuestros pensamientos son increíblemente poderosos, se evidencian en nuestras creencias y en nuestros valores, forman una estructura donde cada uno se refleja en el espejo de los otros, van cambiando a lo largo de la vida y están determinados por nuestros condicionamientos socioculturales: por familia, escuela y sociedad.

¿Nos hemos percatado de que la mayoría de nuestras creencias están ligadas a nuestros condicionamientos y del impacto que han tenido y tienen en cómo nos percibimos, quiénes creemos que somos y cómo vivimos? En otras palabras ¿qué tanto somos conscientes de que de nuestras creencias dependen nuestras actitudes?

Es necesario cuestionarnos cada una de ellas. En el proceso de autoconocimiento que plantea la
Semiología de la Vida Cotidiana® descubrimos que muchas de esas creencias que tenemos tan arraigadas desde
la más tierna infancia, son impuestas o adquiridas, algunas las hemos adoptado por una fidelidad a nuestra familia
o grupo cercano de amigos, compañeros o colegas: al clan, y lo hemos hecho para ser aceptados
y sentirnos arropados por un grupo y afirmar nuestro sentido de pertenencia. Los individuos necesitamos
a lo largo de la vida sentir que pertenecemos a un colectivo, que formamos parte de algo más.

Muchas de nuestras creencias la hemos adquirido a través de la religión, otras en la escuela: es momento de decidir qué creencias nos aportan y cuáles nos atrapan y nos limitan, identificar qué creencias están alojadas en lo más profundo de nuestra psique e influyen en lo que decidimos y hacemos, en cómo vivimos nuestro día a día: como nos comunicamos, como nos percibimos, y lo más importante: lo que creemos y pensamos de nosotros mismos.

¿Qué creencias percibes que no resuenan con tu verdadera esencia, y que te están limitando y frenando
en tu propia realización personal?

¿Qué creencias te frenan de adoptar las nuevas costumbres con las que nos encontramos en este país que
ahora nos acoge? ¿Y qué creencias nos están impidiendo abrirnos a crear nuevos hábitos que se adapten
mejor a nuestro nuevo estilo de vida?

Sólo transformando conscientemente las creencias limitantes podemos avanzar y mejorar nuestra
adaptación en la nueva cultura y sociedad en la que estamos construyendo un nuevo proyecto de vida.

Si no nos abrimos en esta nueva etapa de nuestra vida y abrazamos la cultura y sociedad en la que estamos
ahora inmersos, nos estamos perdiendo de la riqueza que se muestra ante nosotros. Podemos integrar nuevas costumbres, prácticas y experiencias que nos enriquezcan como personas y como consecuencia
aporten brillo a nuestro día a día y en definitiva a nuestra nueva vida en España.

La invitación del modelo educativo de Semiología de la Vida Cotidiana® es una aportación del
Dr. Alfonso Ruiz Soto® y es una guía para adentrarnos en la exploración y conocimiento de nosotros mismos
con el objetivo de poder desarrollar nuestra conciencia y alcanzar la transformación de nuestro autoconcepto.

“Solo cada individuo puede elevar su propio nivel de conciencia. Nadie puede hacerlo por nadie más.”
Alfonso Ruiz Soto®.

¿Quieres cambiar una actitud disfuncional que no te ayuda y que detectas que te aqueja en cualquiera de
las esferas de tu proyecto de vida, ya sea la esfera del trabajo y vocación, familia, salud o vida social?
Ahonda en tu sistema de pensamientos, creencias y valores y transfórmalos para transformar esa actitud
y generar una actitud funcional. Cada uno genera en su marco interno el significado que le da a lo que vive:
vivimos lo que los hechos significan en nuestro escenario interno de conciencia. Y es, a través de
transformar la actitud, que podemos transformar el significado de lo que vivimos.

“No es lo que nos pasa, sino lo que hacemos con lo que nos pasa lo que determina nuestro nivel de conciencia.”
Alfonso Ruiz Soto®

¿Cómo podemos hacer el cambio?

Lo primero es asumir la responsabilidad de tomar las riendas de nuestras nuevas vidas en España, creando y sembrando pensamientos positivos, soltando con amor y agradecimiento todas las historias y patrones del pasado, historias de nosotros mismos y de nuestros antepasados, dejar ir las creencias limitantes y aplicarse en el compromiso con nosotros mismos. Mantener el enfoque en pensamientos, creencias y valores que queremos transformar y cultivar que estén cargados de confianza, gratitud, voluntad, fuerza, y resiliencia.

Si nos vemos en la circunstancia que los pensamientos parece que tienen vida propia y que conectan con la duda en lugar de la esperanza, el miedo en lugar de la alegría, la ansiedad en lugar de la determinación, o la preocupación por el futuro en lugar de la certeza del presente, siempre podemos hacer una pausa, centrar nuestra atención en nuestro ser y decir “quiero y merezco algo mejor que esto”, eso ya es una elección y un acto creativo de la conciencia para no entretener la negatividad. Mientras más la entretengamos, más tardará en salir de nuestros pensamientos, de nuestras creencias, de nuestras vidas.

¿A qué quieres decir SÍ? ¿A qué quieres decir NO? ¿Cuáles son los bloqueos que puedes trascender? ¿Cuál sería una pequeña acción que tu YO del futuro te agradecería hoy? Quizás tener contigo un pequeño acto de amabilidad, o un momento de auto cuidado, comenzar algo nuevo o retomar algo que está pendiente de continuar o terminar. Utiliza tu propia energía creativa para dirigirte hacia una vida llena de propósito, llena de intención. Confía en tu intuición y déjate guiar hacia ese futuro que estás construyendo en el presente.

A todo, absolutamente a todo lo que hacemos, pensamos, decimos, etc., nos vinculamos desde el amor o desde el miedo. Los peores escenarios catastróficos que inventamos nos atrapan y permitimos que nos invadan los miedos y preocupaciones. Observa si el miedo es lo que predomina en tus pensamientos.

El momento presente es el único momento en el que podemos crear y elegir sabia y conscientemente el pensamiento positivo que nos ayude a avanzar. El presente es un regalo, por eso se llama PRESENTE; cultiva libremente tu presencia y goza de esa experiencia. No se trata de hacer, sino de en quien te quieres convertir haciendo lo que haces. ¿Cómo puedes mantenerte fuerte y arraigado sin importar lo que ocurre en tu camino? La actitud es el verdadero éxito.

Permite a tu ser conectar con un sentido de profunda libertad al elegir las creencias y pensamientos con los que resuena tu verdadera esencia. No por decidir adoptar creencias nuevas a las que se han impuesto en la familia, por ejemplo, dejamos de pertenecer a ella, ni tampoco significa que rechacemos nuestro origen. Se trata de ser fieles y leales a nosotros mismos atendiendo a lo que resuena en nuestro corazón, en nuestro sentir y en conexión con nuestro más profundo deseo.

Mantener pensamientos de integridad evitando pensamientos y creencias de autocrítica y juicio nos abre a nuevas perspectivas de percibirnos como alguien renovado.

La emoción siempre nos guía: cuando experimentamos una emoción de expansión sabemos con claridad que estamos yendo en la dirección de nuestro anhelo y hacia nuestro desarrollo de conciencia. Conecta contigo y llénate de esa energía irradiando tu llamado interno. Eleva tu frecuencia vibratoria y deja que lo que es para ti te alcance. Enfócate y comprométete, descúbrete, existen posibilidades infinitas. Renuévate, conócete: brilla e ilumina una nueva y mejor versión de ti mismo. Atrévete a pensarte, creerte y valorarte diferente.

Es una decisión, es TU decisión.